Fiesta

 BODA DE PILAR Y DANI

 Pilar y Dani, Dani y Pilar, tanto monta, monta tanto, como decían de los Reyes Católicos, se han casado el pasado 1 de Julio de 2023.

En Agosto del año pasado nos dieron la noticia de forma gráfica.

 

       Acompañada de un brindis marinero.

       A partir de aquí empezó todo a ser un secreto que, los que no estábamos metidos en el ajo, que eran solo ellos dos, no entendíamos. No sabíamos donde se iba a celebrar ni la fecha. Preguntaban los amigos y los parientes y no sabíamos qué contestar. Y lo poco que sabíamos, teníamos prohibido decirlo bajo pena de la vida.

       Por lo visto, es que no querían hacer una boda al uso y salirse un poco de lo clásico. Luego descubrimos que lo de la Fiestuca es por donde iban los tiros. Vamos, una fiesta dirigida a esa Pandilla tan enorme, tan unida y tan fiestera que tienen, con la que están continuamente, eso, de fiesta y de fines de semana por toda España y parte del extranjero.

       Y se lo pasaron de miedo. Nosotros, bueno, también.

       Llegó por fin la invitación:

         Desde luego, original.

        Antes de seguir, debo aclarar que Pilar es mi hija, la menor de los tres hijos que tenemos, dos hijos y una hija.

 

 

       Y Dani, lógicamente, el novio.

       Pues, a lo que íbamos. Eligieron para el evento el Hotel Rural Tresmentiras, de Aldeanueva del Camino. Cercanía relativa, amplitud, césped y… piscina, que luego descubrimos que era parte esencial de la puesta en escena.

       Un inciso. Tendría yo unos quince años, o sea, hace más de sesenta, que nuestro tío Pedro Téllez, casado con Carmen Gómez-Rodulfo Brugués, nos contó su ocurrencia de que Aldeanueva del Camino era el pueblo de “las tres mentiras”: No es aldea, ahora es pueblo. No es nueva sino muy antigua y no es del camino, sino de la carretera.

       Mira por donde, ahora a este Hotel Rural le han puesto ese nombre. Se conoce que hubo más personas con la misma ocurrencia. (Es que está a huevo)

El Hotel y la zona ajardinada con piscina.

       Empezó la ceremonia con el paseillo tradicional del padrino con la novia camino del altar (o lo que sea ahora).

La Novia, el Padrino (su padre) y la Portadora de los anillos (su madre).

Llegada triunfal aclamados por la multitud.

 

El Novio y la Madrina esperando que caigan del cielo.

Y, hechas las presentaciones, posamos para la posteridad.

Comienza la función.

Los novios preparados y atentos.

La ceremonia la dirige Mavi con simpatía y buen hacer.

 

 También las amigas quieren poner su granito de arena.

Imprescindible la entrega de anillos.

Para que todo quede atado y bien atado.

 

Creo que, en mis tiempos, esto no se llevaba.

Todo fue muy familiar, agradable y emotivo.

El lugar era el adecuado y el ambiente estupendo.

Parecía que estábamos todos juntos en el mismo nido.

Como final de la ceremonia, los arroces.

Y llegó la hora de las felicitaciones. La familia…

La familia…

Los amigos…

Las amigas…

…y amigas…

…que organizaron su fiesta particular.

 

Y todo discurría “según las normas”.

Incluso el momento de firmar “los papeles”.

Las personas serias, en su sitio.

Como debe ser.

Y como mandan los cánones.

La foto familiar de Pilar.

 

Pilar con sus padres.

Pilar y Dani con su hermano…

…y con su hermana y familia.

Los hermanos de Pilar en primera fila.

 Y posando con sus hermanos (ya).

No faltaron los primos, algunos ya dispuestos para la “guerra”.

Ni los sobrinos.

Y las sobrinas.

Hasta el más peque.

 Y la familia lejana (en kilómetros).

Pero, de repente, pasó esto.

Pilar y Dani levantaron la veda…

…de la etiqueta…

…y ¡todo el mundo al agua!

Parece ser que era una de las condiciones de la Fiestuca.

        A todos los invitados nos dieron una bolsa con un bañador, camiseta amarilla, gafas de sol amarilla y otros complementos para pasar la tarde fresquita y, como el sol ya apretaba, lo aprovechamos con sumo gusto.

Luis, antes…

…y después, con sus sobrinas. (A ver esa camiseta)

Todo el mundo en el agua y/o bailando ¿por qué?

Estaba acechando en la sombra este grupo.

Qué contentos están. No saben la que les espera, porque esta plebe no se cansa.

Lo mismo les da a la sombra…

…que al sol.

Porque nos refrescamos por fuera y por dentro.

Yo también.

Y las primas y sobrinas…

…que tienen mucha marcha.

 Aquí no te vale de nada parecer serio.

 

Y es que este personal, Pilar la primera, deberían haber nacido peces. Se meten en el primer charco que ven.

Y aquí hay una buena pecera para seguir bailando.

¿Es de noche ya? No importa, la Fiestuca continua.

        Y colorín colorao, la Fiesta se ha acabao.

        Todavía me paran conocidos para comentarme lo bien que lo pasaron ellos o sus hijos. Pues como dicen por aquí:

¡De lo cual me alegro!

Cuando fueron a comprar las gafas.